El Madrid, un equipo con una contundencia fuera de serie, con jugadores que te matan a la primera que tienen, salieron en un mal día, no quisieron definir, sin embargo, ya se encargó el Barça de darles cuatro regalitos, cuatro ‘nada más’ que se convirtieron en ‘tan sólo’ cuatro goles.
Sí, no hay porqué crucificar a todos, sin embargo, hubo cuatro errores puntuales, 1. Busquets en una terrible marca a Cristiano 2. Valdés y su regalo a di María 3. Masche, extrañamente, da un regalote a Higuaín 4. Piqué vuelve a darle regalo de navidad a Cristiano.
Así es y a esto sumamos una expulsión de Adriano consecuencia de un mal partido defensivo, o quizá no tan malo, el Barça suele cometer errores atrás, sin embargo, el corazón y la garra de Puyol le salva muchos malos días a Piqué y Busquets sobre todo, a veces es Valdés, quien hoy estuvo muy bien, y muchas otras, quien si no, Messi y compañía, junto con sus estratosféricas cantidades de goles.
Hoy no pudo ser, el Barça con 10 jugó mejor, Messi hizo una genialidad, demostrando la gran clase y puntería que tiene al cobrar de falta, Vilanova hizo dos cambios correctos, uno no tanto, y Casillas, Casillas… al menos sacó tres claras e impresionantes de gol, sobre todo, aquella última que más que acierto del meta me parece error de Montoya.
Del primer tiempo, poco que decir, el Madrid no quiso matar, o quizá no pudo, nunca se sabrá, pero sí, jugaron mejor que el Barça, quizá venían sueltos, pues les habían quitado presión de muchas cosas, mientras que los culés, se veían preocupados, como si la baja de Alves, el mejor lateral derecho del mundo, fuera demasiado, y sí… Alves ha contenido a Cristiano como nadie en el planeta lo ha podido hacer, aparte de que seguramente, plantado ante Casillas, en la situación de Montoya, el resultado hubiera sido diferente, aunque la realidad es que no jugó, ni él ni Puyol.
Vilanova dio a entender que su sistema es con línea de 4 y no pretende buscar la línea de 3, algunos culés respiramos tranquilos, otros se lo recriminarán, sin embargo, lo único que le recrimino es la salida de Pedro, pues es quien más peligro le genera al Madrid, no se cual es la razón, no se si es psicológico, sin embargo, el Madrid lo ve y tiembla (Messi aparte), y la entrada de Tello en lugar de Villa, Tello quien no ha dado resultados frente a los blancos, mientras que Villa, pareciera tenerles tomada la medida. Lo de Fàbregas es mucho más complicado, pues la expulsión y la necesidad hacían ver todo de una manera diferente, al final, un cambio menos.
Lo más destacable, Song demostró ser un jugador con clase, duro, fuerte, poderoso, que puede darle mucho balance y equilibrio a la contención y no solo eso, que tiene una salida impresionante, realmente me recuerda mucho a aquel Toure que tras recuperar un balón salía cual jugador ‘habilidoso’. No se si fue el cambio u otras situaciones, pero el Barça se vio mucho mejor con Song en el campo.
Por último, gracias Barça, no solo por tu juego, sino por demostrar que el que es grande lo es tanto en la victoria como en la derrota y que no hace falta hacer berrinches o irse a bañar sin homenajear al victorioso, con todo y que en el marcador, hubo igualada y fue un error de Valdés lo que le daba ese gol de visitante que al Madrid tanto le valió. Gracias Barça por demostrar categoría, señorío, madurez, en fin… lo que es ser el mejor y más grande equipo del mundo.
PD: Merengues… los esperamos en Liga, que seguro que será apasionante, mientras tanto, enhorabuena.
Twitter: @UnCulePerdido
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