Desconocido en casa.

Un fragmento de un capítulo del libro que se está preparando.

Josep Guardiola i Sala, mejor conocido en el mundo como ‘Pep’, regresaba al primer equipo del Barcelona, ahora como entrenador, en quizá uno de los retos más importantes de su carrera.

Poco había que decir sobre este ‘caballero’ de las canchas, puesto que su enorme y exitosa carrera es conocida por todo el entorno futbolístico, y aún más por su propia ‘familia’, la blaugrana.

En 1990 y frente al Cádiz, el Camp Nou vería debutar a un joven de 19 años y a pesar de su enorme calidad y un bastante buen juego, a pesar de que el Barcelona no daría su juego más brillante a pesar del 2-0 a su favor, pocos imaginaban que aquel muchacho que debía dejar los nervios de lado para convencer a su míster, llegaría a ser una leyenda culé, su impecable trayectoria dentro del club, le llevaría a ser pieza fundamental en el medio campo del Dream Team, equipo que conseguiría ganar muchos títulos y lo más importante, enamorando a todo público que pudiese verle.

Su palmarés como jugador es envidiable, aunque solo cuenta con títulos conseguidos en el cuadro catalán, donde se pueden contabilizar seis Ligas (1991, 1992, 1993, 1994, 1998 y 1999) 4 Supercopas de España (1991, 1992, 1994 y 1996), 2 Copas del Rey (1997 y 1998), 1 Champions (1992), 2 Supercopa de Europa (1992 y 1998), 1 Recopa de Europa (1997) y con la Selección Española, el Oro en Barcelona 1992.

Y después de más de 10 temporadas como culé, estrictamente en el primer equipo, pues como sabemos, es producto del trabajo de fuerzas infantiles del Barça, el gran Capitán, y eterno número ‘4’ del cuadro catalán debía emigrar, y su primer destino sería Italia, donde llegaría para jugar con el Brescia, donde tendría muy poca actividad y para el siguiente año y a pesar de cambiar de equipo a la Roma, su suerte no sería mejor, lo que significaba su regreso al cuadro de la Brescia. Y para terminar su carrera como futbolista, viajaría a ligas más exóticas, como la de Qatar, donde jugaría dos años para el Al-Ahli y la mexicana donde sufriría el descenso con los Dorados de Sinaloa, sin embargo, estas experiencias seguramente fueron importantísimas y muy determinantes en su formación.

Sin embargo, y a pesar de toda su experiencia, la afición y la prensa eran muy escépticas con la llegada del de Sampedor, puesto que su gran experiencia como jugador y como culé, contrastaba con su escasa experiencia como director técnico, donde, a pesar de haber salido campeón con el Barcelona ‘B’ en la Liga de Fútbol de la Tercera División, un año a cargo de un equipo de categoría ‘B’ y con un objetivo principal meramente formativo, parecía no darle los papeles necesarios para merecer sentarse en el banquillo del Camp Nou.

Sin embargo, y a pesar de todas las críticas, la directiva decidió darle todo el apoyo y el símbolo culé, sería el encargado capitanear la nave culé, que se internaría en un océano lleno de complicaciones, emociones, alegrías, felicidad, obstáculos y sobre todo éxito, pocos aficionados, periodistas, expertos y me atrevo a decir, el mismo Guardiola y sus jugadores, se imaginaban la historia que estaba por comenzar a escribirse, la historia del ‘Pep Team’…

Messi vs la demagogia

Dos partidos de Copa América había enfrentado Lionel Messi, y su selección, su EQUIPO, no había podido pasar de un empate a uno frente a Bolivia y de un empate a cero frente a Colombia, y a pesar, de que frente a los bolivianos, el del Barça sería nombrado el mejor jugador del partido, las prensas, sobre todo argentinas y madridistas, comenzarían con una campaña de desprestigio contra el mejor jugador del mundo.

Según fuentes cercanas al ‘10’, estaba momentos muy malos, muy difíciles, las críticas de su propia afición y su propio país, incluso de manera muy injusta, hacían parecer que la debacle argentina, eran culpa solamente de Lio, cosa totalmente incierta, puesto que si alguien se intentaba poner el equipo en los hombros era éste.

Claro que no es lo mismo jugar en Argentina que en el Barcelona, y no por la calidad de jugadores, sino por el planteamiento del míster albiceleste, puesto que Messi debe jugar en una posición que no es la suya, arrancando por el centro y entre 4 o 5 defensores, cosa que ni él mismo puede hacer como si nada.

Al final, Argentina debía enfrentarse a Costa Rica con la obligación de ganar para asegurar su clasificación a la siguiente fase, los cuartos de final, y los de Lavolpe no se dejarían ganar así de fácil.

Al comenzar el partido, Messi se veía preocupado, pero daría muestras de quién es y de la calidad de jugador que es. Bastaron minutos para que Messi comenzara con su recital, pases exactos, driblando defensores y soltando el balón a tiempo para que sus compañeros definieron, o mejor dicho, equivocaran en la definición, incluso la mejor jugada del partido fue totalmente armada por el culé. En la salida tica, Messi pelearía el balón, y lo recuperaría él solo, prácticamente en el medio campo, al recuperar la pelota, dribló en diagonal a cuatro defensores, y cuando tenía todo para tirar, encontró una mejor opción, Higuaín se desmarcó y el ‘10’ le filtraría una pelota exacta que Gonzalo recibiría dentro del área, pero mandaría a volar por las nubes, demostrando que no estaba en su día. La dupla Messi – Higuaín, así fue, el culé mandando centros y pases de medio gol y Gonzalo fallando a diestra y siniestra.

Para la segunda parte no cambiaría la cosa, y de nueva cuenta sería Messi el líder de Argentina, y asistiría al Kun Agüero y a Di María para el segundo y tercer gol de los locales, esto sin contar las innumerables ocaciones que generó en una segunda mitad digna de enmarcarse, incluyendo el último pase peligroso que le daría a Lavezzi, quien para su mala fortuna estrellaría la pelota en la madera.

Al final Messi, sería, de nueva cuenta, nombrado el MVP del partido, demostrando que las críticas son más que infundadas y una mera campaña de desprestigio, cualquiera puede tener un mal día, pero cuando en dos de tres juegos, eres nombrado el mejor de ellos… es que tan mal no lo estarás haciendo.

Argentina y Messi se han quitado una presión de encima y estará en ellos el salir adelante y quizá ganar ‘su’ Copa América, lo mejor, está por venir, a disfrutar a Brasil y Argentina, perseguidos por Colombia, Venezuela y Chile.

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México gana ‘su’ mundial.

Justo un año después de la final del mundial que ganaría España, le tocaba a los jugadores sub 17 jugar el suyo, competencia que se celebraría en México y que curiosamente, España no se clasificaría.

Después de muchos encuentros de muy buen nivel, donde el fútbol es más puro y bello, gracias a lo poco ‘maleados’ que se encuentran los jugadores a esta edad, uno se puede encontrar con juegos muy parejos e interesantes.

En estas categorías, las fuerzas suelen igualarse, tanto que incluso hay equipos africanos y el mismo México campeones del mundo.

Pues bien, a las semifinales llegarían los cuatro mejores equipos del torneo, Brasil, quien siempre es favorito en cualquier nivel, jugaría contra Uruguay, que con su garra y buen fútbol, sorprendían al mundo con su aparición en estas instancias, pero no se puede olvidar su cuarto lugar en Sudáfrica, y en la otra llave, la siempre difícil y muy organizada Alemania, frente al rival más duro, quizá no por tradición, sino por ser local, México.

Mientras Uruguay pasaría por encima de Brasil, con un 3-0 en el luminoso, la otra semifinal nos depararía muchas más emociones, los locales comenzaban ganando antes del minuto 5 pero los alemanes lograban dar la vuelta al marcador, y cuando todo parecía indicar que los Alemanes se presentarían en la final, el milagro mexicano, gracias a un gol olímpico y un gol de chilena, anotado por Gómez, quien minutos antes había salido con una cortada muy grande en cabeza, lograban el éxtasis del público mexicano, que volvía a tener una alegría gracias a sus ‘niños’.

Para el domingo 10 de julio, el Azteca era el marco perfecto, con un juego más que interesante como ‘telonero’ entre Alemania y Brasil y la gran y esperada final entre charrúas y aztecas, la Ciudad de México se paralizaba con la esperanza de que los chavos, le dieran otra alegría a una afición que de la mayor no aspira a más allá de una Copa Oro. El juego preliminar, espectacular, con un Brasil que juega gracias a sus individualidades, contra el gran orden táctico alemán, los teutones iniciaban ganando, pero Brasil parecía sentenciar el encuentro en el primer tiempo al anotar tres goles, sin embargo, en una pelota parada, los alemanes, con la cabeza, recortarían distancias, para llegar al medio tiempo con un 3-2 en el marcador a favor de los cariocas.

Para la segunda mitad, sería de nueva cuenta espectacular, y en 20 minutos, los alemanes, que nunca se rinden y apoyándose en dos golazos, darían la vuelta espectacularmente poniendo el marcador 4-3, durante los últimos minutos, Brasil se veía desesperado y buscaba atacar por donde fuera, pero el orden alemán se imponía y también en esta categoría, los teutones se quedaban con el tercer puesto.

Terminado el duelo por el tercer puesto, vendría lo que todo el estadio esperaba, México y Uruguay saltaban a la cancha, los dos mejores equipos del torneo disputándose la Copa Mundial Sub17 y el Azteca con sus 104mil asistentes se rendía ante sus héroes con gritos y aplausos. Un pequeño y vergonzoso indicio de rechiflida al himno charrúa se vería callado por los mexicanos que pidieron respeto al himno rival, haciendo callar los pitos de una fanaticada inmadura que no ha podido dar el salto a una conocedora afición, sin embargo, y para la suerte del torneo el himno transcurriría con respeto, para continuar con el himno mexicano, que todas y cada una de las gargantas entonarían, silenciando incluso la pista del sonido local.

El marco era perfecto, los uruguayos buscaban un ‘maracanazo’ en categorías inferiores, mientras los mexicanos buscarían apoyarse en su público para levantar por segunda vez en seis años la copa.

El partido sería muy interesante, el parado táctico de ambos equipos era muy marcado y los errores individuales eran los que daban las oportunidades, y sería Uruguay quien estrellaría el primer balón en el poste, robando el aliento a un Azteca que se vio por unos instantes en desventaja, sin embargo, al minuto 31, el defensor universitario, Escamilla, enviaría un centro que Fierro recentraría y Briseño, el capitán, enviaría al fondo de las mallas, el estadio se desbocaba y el ambiente parecía el de cualquier juego de la selección mayor.

El medio tiempo y la segunda mitad, llegarían con el marcador de 1-0 en el luminoso, y el empuje uruguayo se enfrentaba a una férrea defensa mexicana, que sufriría de más, e incluso otro poste se atravesaría en el empate uruguayo, dejando todo para los últimos minutos.

El árbitro daría cuatro minutos de compensación, que parecían aire para los uruguayos, sin embargo, el agotamiento de la altura, le pesaría a los charrúas, y al final sería Casillas, quien en un gran contragolpe en equipo, liquidaba el encuentro y conseguía que la Copa se quedara en México.

México es bicampeón mundial, sin embargo, hay que saber separar entre este logro, y lo que el mexicano realmente desea, el ganar en estas categorías, no significa éxito en la mayor, tan solo significa, que con un buen proceso a largo plazo y con conciencia y responsabilidad, se puede aspirar cada vez a mejores y mayores logros en cada una de las categorías, tampoco hay que pedir que estos niños, sean titulares o debuten en primera división, al final son eso, niños, y si se fuerza su progreso y su salto a las plantillas del primer equipo, podrían verse coartadas carreras muy interesantes, que aún deben cumplir el proceso sub 20 y luego buscarse un lugar en el profesional.

Felicidades a todos y cada uno de los equipos participantes, en especial los últimos cuatro participantes, que nos demostraron que el fútbol sigue teniendo una esencia pura y poco mercenaria, donde se juega sin buscar trampas, salvo algunos casos, y se pretende el buen trato del fútbol, es muy lindo ver a estos cuatro equipos que nos regalaron 4 excelentes partidos en semifinales y final.

PD: Como mexicano me quedo con el México – Alemania como el mejor encuentro del mundial, sin embargo, como aficionado al fútbol, me quedo con el Alemania – Brasil, que además tuve la fortuna de poder ver en vivo previamente a la final, que espectáculo tan hermoso le regalaron a nuestro país.

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En la mira de la prensa.

La Copa América finaliza en su primera jornada, y tras diferentes resultados, la prensa mundial ha decidido dar rienda suelta a sus críticas y demagogia.

Iniciaba la Copa, y los locales, Argentina, debían enfrentar a una, aparentemente débil, pero siempre complicada Bolivia, ya los bolivianos le habían pegado, en la altura de La Paz, a los argentinos con una goleada de escándalo, que si bien, parecía tener un pretexto con la altura, ningún pretexto será suficiente para semejante ridículo. Pues bien, la Copa comenzaba y era Bolivia el primer equipo encargado de anotar y tendría que ser el Kun, quien con un buen gol, arañara un punto a favor de los locales.

Al terminar el encuentro, las críticas no se hicieron esperar, y sería Messi, quien gracias a una prensa argentina, siempre fatalista, y una madrileña, o mejor dicho madridista, siempre buscando con que pegarle al Barça, aunque no haya actividad, criticarían demagógicamente la actuación de un Lionel, que si bien no salió en su día, si intentó y mucho, sin embargo, cuando no solo no juegas en tu posición, sino que te delegan funciones a las cuales no estás acostumbrado, y aparte, el conjunto de la selección no funciona, es imposible sacar adelante a un equipo. Curiosamente los mismos que tanto le criticaron, comentaban que ‘salvo chispazos de Messi, la selección argentina no hizo mucho’ o por ejemplo ‘estuvo en todas partes y en ninguna a la vez’ haciendo alusión a que si quizá no fue su día, había intentado y cualquiera puede salir en un mal día.

Al día siguiente debutaría otro jugador en la mira de la prensa internacional, Neymar, quien ciertos sectores aseguran su fichaje por el equipo blanco, a pesar de que su club ha informado que simplemente no es negociable.

En fin, objetivamente, Neymar tuvo una actuación, si no peor que la de Messi, si al menos de la misma calidad, sin embargo, en la prensa fanática de cierto sector, informaban o ‘desinformaban’ diciendo que había sido lo ‘más rescatable de un gris Brasil’, cuando eso no es más que pura publicidad a un jugador que aún ni siquiera es seguro que aterrice en la capital española.

La actuación y la manipulación de ambas actuaciones fue el broche de oro a una portada y una ‘nueva’ comparación contra Messi, donde quien tiene todo que perder es el brasileño, puesto que el palmarés de uno incluye 3 Champions League y dos Balones de Oro, mientras que otro, apenas ha logrado una Copa Libertadores y no ha demostrado nada en Europa.

Y para finalizar con la polémica, Alexis Sánchez, un jugador por el que de manera disfrazada, el Barça estaría dispuesto a fichar por 40 millones de Euros, se presentaba en la Copa América, frente a una selección Sub22 ‘B’ (ni siquiera ‘A’) de México, y durante su debut apenas se vería, y las pocas veces que tocaba el balón, no demostraba la calidad de la que tanto se presume y por la que el Udinese pide un precio de ‘Balón de Oro’.

Alexis Sánchez no ha logrado convencer a muchos escépticos, aunque muchos otros lo seguirán defendiendo, cuestión de gustos.

En fin, ojalá se pueda disfrutar de la Copa América a partir de la segunda vuelta y al presión que tanto ha afectado a ciertos jugadores, desaparezca por el bien del fútbol.

PD: Las comparaciones con Messi son odiosas, ya fue Robinho, Robben, Higuaín, CR, Di María, entre otros, y ninguno, absolutamente ninguno ha salido bien librado, hoy es Neymar, y este ni siquiera ha jugado en Europa, ¿de verdad es necesario seguir con este juego inútil?

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